Piquetazo político
Foto: Presencia Universitaria
Dengue, paracetamol y derechos
humanos
Epígrafe
“Acetaminofén /paracetamol” Es la droga más usada
ampliamente en el mundo. Y es el componente más peligroso en uso médico.
Causante de cientos de muertes en los países industrializados por ocasionar
fallo hepático agudo. El paracetamol fue descubierto por error, se creía que
era útil para helmintos, después se creyó más seguro que la fenacetina la que
causaba nefritis intersticial y nefropatía, lo cual era falso. Posteriormente,
se descubre la producción de un metabolito de alta toxicidad, el N-acetil-p-benzoquinoneimida)
(NAPQI), que no solo causa falla hepática aguda y daño renal, sino que también
alteración del desarrollo del feto y del recién nacido. Se necesita revisar
nuevamente el riesgo -beneficio de este compuesto. [1]
Propósito
Este ensayo sigue el método
expositivo sin un lenguaje estrictamente técnico porque es para un auditorio o
público no médico.
El
propósito no es alarmar a la población, si orientarla en cuanto a las
verdaderas causas de la enfermedad infecciosa y las implicaciones que tiene el
uso muy generalizado del paracetamol, no solamente en el dengue sino en
cualquier dolencia común, existiendo una variedad de medicamentos de uso
público que contienen esta droga.
El tema es complejo por lo cual utilizaremos un
planteamiento teórico de uno de los redactores de este ensayo: la holobiosalud.[2]
Nuestro
objetivo central es contribuir desde un punto de vista ético a la salud humana
y de la madre tierra. En mi calidad de coordinador del equipo interdisciplinario, Integrado
por técnicos científicos, humanistas y defensores de los derechos humanos.
Soy responsable de la forma, contenido y redacción de este ensayo y lo que he
hecho es tomar en consideración el aporte sustantivo de las ideas técnicas y
científicas de los integrantes de este equipo de trabajo, de tal forma que
cualquier comentario o pregunta al respecto, favor dirigirse al Dr. Juan
Almendarez, al correo electrónico: Almendarez.bonilla@gmail.com.
Introducción
El
tema central que nos ocupa es la epidemia del dengue que ha ocurrido durante el
año 2019 en Honduras que se ha caracterizado por una alta mortalidad y
morbilidad (según las autoridades de salud pública, hasta la semana 36 se han
diagnosticado 75,199 casos de dengue de los cuales, un promedio de 15,109 es de
dengue grave) [3]. Para
explicar esta problemática vamos a utilizar el concepto o el modelo de la
holobiosalud que se refiere a la salud de la totalidad de la vida no solo de
los seres humanos sino de todas las especies. En esta cosmovisión se articulan
diferentes componentes por lo cual hemos desarrollado un trabajo
interdisciplinario basado en el aporte de Rolando
Garcías en su trabajo sobre sistemas complejos[4].
La holobiosalud se define o explica de holos
totalidad, bios vida y salud= salud de la totalidad de la vida de todas las
especies.
El término BIOS no solamente tiene un sentido biológico de
vida, sino que tiene un contenido social y político porque BIOS es naturaleza,
pero también significa la organización social del Estado y de la vida familiar
y comunitaria, por lo tanto, tiene un contenido histórico social y
político. La salud, es un valor o
cualidad esencial de la vida, cuya alteración es la enfermedad por eso bien se
dice que estar sano es el proceso de bienestar de condiciones que garanticen la
calidad de la vida y es estar completo para una vida integral productiva y
reproductiva donde prevalecen el convivir solidariamente en forma armónica con
la naturaleza y con la sociedad.
Para profundizar, el problema que estamos analizando vamos a
explicar la causalidad de la enfermedad infecciosa que no solamente depende de
un agente causal el mosquito como vector y el virus como agente directo, sino
que corresponde a una causalidad más
compleja en la cual intervienen condicionantes histórico sociales, ambientales,
políticas del estado y de los sectores transnacionales (minería, proyectos
hidroeléctricos, mega proyectos turísticos, destrucción del bosque y la
biodiversidad). Estas son las verdaderas
causas de la sequía, del encarcelamiento del agua, de las soluciones falsas en
la cuales se construyen más represas y se trabaja menos en la reforestación, en
el restablecimiento de la biodiversidad, en el manejo de las basuras, en el
respeto a la vida de los ríos y los mares.
Las consecuencias de todo esto es la migración del campo a
la ciudad y de pobreza urbana a otros países principalmente USA y Europa.
Es importante destacar que no solamente migran los humanos,
sino las especies que se multiplican en los lugares de mayor población humana
dado que al morir las otras especies por la sequía o las inundaciones, los
mosquitos y las chinche buscan la sangre de las personas y sobre todo de las
más pobres.
La
relación de estos sistemas complejos la podemos apreciar dado que el agua sería
el sistema central que tiene sus niveles propios de organización pero que está
articulada a otros sistemas, como por ejemplo el bosque, la biodiversidad, el
crecimiento poblacional la construcción de represas, la vida de los ríos, y la
industrialización minera, la construcción urbana, etc. Como el agua es una unidad viviente tiene que
mantenerse viva porque al morir, mueren las plantas, los animales y los seres
humanos.
Palabras claves:
Holobiosalud,
Acumulación, capitalista por desposesión, agua como derecho humano,
privatización, epigenética, estrategias adaptativas, estrategias
desadaptativas.
¿Qué ha pasado en Honduras con el
agua?
La puesta en venta del territorio nacional, los múltiples
proyectos de la industria minera que al explotar a cielo abierto con cianuro la
contaminación resulta mayor, y el impacto destructivo del ambiente, es fatal,
en igual forma las llamadas zonas especiales de desarrollo que le dan autonomía
a las empresas multinacionales, y la acumulación capitalista por desposesión
que desplaza a las comunidades campesinas e indígenas y garífunas agrava
sustancialmente las condiciones de vida, miseria, el hambre la desnutrición que
altera la inmunidad, y por lo tanto produce un estado de poblaciones
vulnerables más susceptibles al dengue, a las enfermedades infecciones a lo que se ha llamado la multienfermedad.
Sumado a lo anterior se encuentra el uso de fármacos que al
actuar en organismos más vulnerables van a producir mayor toxicidad y por lo
tanto cualquier enfermedad sea infecciosa o no va a resultar con mayor grado de
morbilidad, mortalidad. A estas situaciones ecológicas se suma las condiciones
de estrés, terror, miedo que sufren las poblaciones y que debilitan los
organismos, haciéndolos más susceptibles para que se produzca en realidad
múltiples enfermedades. Por ejemplo,
cuando disminuye la inmunidad en ciertos animales estos son capaces de
enfermarse y transmitir estas enfermedades a los humanos.
En consecuencia con lo anterior, el problema no comienza ni
con el zancudo ni con el virus del dengue, comienza con las políticas nefastas
que contribuyen a devastar la naturaleza y también con los gastos en armas que
menoscaban la salud y la educación.
¿Por qué consideramos que las
políticas de salud particularmente del dengue violan los derechos humanos?
La primera condición es: por lo anteriormente expresado en
Honduras se viola el derecho humano al agua y al saneamiento que reconoció
explícitamente Organización de Naciones Unidas en el año 2010,[5] y
transgrede otros compromisos internacionales asumidos por el Estado de Honduras
en otros convenios internacionales como la Convención Americana de Derechos
Humanos y el Protocolo de San Salvador, sobre Derechos Económicos Sociales y
culturales.
Segundo: El Estado de Honduras incumple su deber de proteger
los derechos humanos, pues esta obligación también implica el deber de velar por que la privatización no represente
una amenaza para la disponibilidad, accesibilidad, aceptabilidad y calidad de
los establecimientos, bienes y servicios de salud.
En contrario sentido, el sistema de salud ha experimentado
progresivamente pero acelerada la privatización de los bienes y servicios de
salud, lo que ha propiciado las condiciones para corromper cada pieza del
sistema, y en consecuencia, se disminuye el acceso y la calidad de los
servicios que el Estado de Honduras está obligado a ofrecer a todas las
personas indiscriminadamente. Es decir, que los servicios de salud se han
convertido en una mercancía, que beneficia a la industria farmacéutica
transnacional en detrimento de la población hondureña, puesto que, aunque lo
indicadores digan que aumenta la tasa de crecimiento de acceso y cobertura, el
problema sustancial es que no hay desarrollo (ni desarrollo social ni
económico), ni salud para el pueblo, y la prioridad gubernamental en Honduras
son las armas.
Tercero: la campaña mediática de salud pública, (que le
cuesta caro al pueblo hondureño), ha estado dirigida al combate del zancudo y
culpa a las comunidades, haciéndolas ver como responsables de la proliferación
del mosquito y por lo tanto del dengue (internalizando la culpa), sin hacer
mención de la obligación del gobierno de Honduras, de adoptar todas las medidas
necesarias para prevenir y tratar el dengue.
Cuarto: los mecanismos se han basado en soluciones falsas
porque no atacan las verdaderas causas del dengue y ejecutan estrategias que
producen daños a corto o largo plazo, por el ejemplo el uso masivo e
indiscriminado de plaguicidas ante lo cuales progresivamente los mosquitos se
han vuelto más resistente y los humanos y otras especies más intoxicados,
alterando profundamente sus sistemas de vida.
Por ejemplo: al producirse desnutrición y la muerte de otras
especies, se altera sustancialmente la inmunidad y los organismos se vuelven
susceptibles a otras enfermedades diferentes al dengue o bien la enfermedad se
vuelve más agresiva (el fenómeno de la multi-enfermedad).
El quinto punto es: al incrementarse la vulnerabilidad de
todo el sistema del agua y los cambios en la biodiversidad, también se logra
afectar la epigenética, generando condiciones diferentes, las cuales van a
crear nuevas situaciones para la aparición de enfermedades emergentes en las
futuras generaciones. Podemos mencionar
mayor susceptibilidad a la tuberculosis, incremento de la diabetes, y otras
alteraciones nutricionales porque no solo somos lo que comemos, sino lo que han
vivido y comido nuestros ancestros.
En sentido de garantía de Derechos Humanos, el Comité de
Derechos Económicos Sociales y Culturales
subraya que “...los Estados tienen
una obligación [...] básica de
garantizar la satisfacción de niveles esenciales mínimos de cada uno de los
derechos reconocidos en el Pacto Internacional de DESC … Con respecto al
derecho a la salud, el Comité ha
subrayado que los Estados deben garantizar:
●
El derecho de acceso a los establecimientos, bienes y
servicios de salud sin discriminación, especialmente para los grupos
vulnerables o marginados;
●
El acceso a alimentos esenciales mínimos aptos para el
consumo y suficientes desde el punto de vista nutricional;
●
El acceso a una vivienda, unos servicios de saneamiento y un
abastecimiento de agua potable adecuados;
●
El suministro de medicamentos esenciales;
●
Una distribución equitativa de todos los establecimientos,
bienes y servicios de salud.
La ausencia de acciones del Estado de Honduras, para
garantizar las condiciones anteriores son la muestra más clara de que las
políticas del Estado violentan los derechos humanos y son una agravante para
que proliferen el dengue y otras enfermedades infecciosas, que a algunos grupos
convienen.
En consecuencia, el piquetazo del mosquito le llamamos un
piquetazo político porque corresponde a la existencia en Honduras de un sistema
injusto que produce múltiples piquetazos a los cuerpos y mentes que ya vulnerables
son más susceptibles a una simple picadita de zancudo.
Por todo lo anterior, no podemos seguir con estrategias
adaptativas a las políticas de un Estado policial militar que aplasta la
verdad, que reprimen las voces y las conciencias críticas y que manipula a
través de mensajes aterrorizantes en los medios para culpar a los hondureños
como responsables de una epidemia causada por las políticas trasnacionales que
se han apoderado del país, no solamente de su territorio desalojando las
poblaciones y produciendo profundas alteraciones de la naturaleza y que han neocolonizado
a Honduras generando una guerra total contra el pueblo.
Por lo tanto, necesitamos desarrollar estrategias
inadaptativas es decir la resistencia la construcción de la esperanza y sobre
todo la rebeldía, ante la injusticia social, ante el crimen contra la
naturaleza y la humanidad del pueblo hondureño.
Es necesario y urgente no solo consumir medicamentos, sino
tomar conciencia crítica del profundo daño que causan cuando no son utilizados
con fines humanos sino mercantilistas por consiguiente tenemos que valorar
profundamente la importancia de la biodiversidad, de nuestras semillas y
plantas medicinales y alimenticias que junto con el agua sana y libre
garantizan la vida de nuestros pueblos.
Lo anterior nos invita a la idea de convivir en comunidad y
unir a nuestro pueblo en defensa de la vida y la dignidad histórica de los
pueblos de América Latina.
Los contribuyentes a este ensayo son presentados
en orden alfabético:
Juan Almendarez: Médico, Fisiólogo, Doctor en Ciencias Sociales, Francia Alvarado:
Médica y defensora de derechos humanos, Ariel
Díaz: Defensores de derechos Humanos, Jeffry Izcano: Estudiante de
fisioterapia, Carlos Leiva: Biólogo y defensor de derechos humanos, Alejandra
Padilla, Arquitecta y docente (UNAH), Sandra Pinel, Médica, anestesióloga y docente en ciencias fisiológicas (UNAH).
Tegucigalpa
28 de septiembre de 2019
Septiembre 16 del 2019
[4]
Ver: García, R. (2011) Interdisciplinariedad y sistemas complejos. [En línea]
Revista Latinoamericana de Metodología de las Ciencias Sociales, 1, 1.
Disponible en: http://www.memoria.fahce.unlp.edu.ar/
art_revistas/pr.4828/pr.4828.pdf Interdisciplinariedad y sistemas complejos
[5]
Ver: Resolución A/RES/64/292:
64/292. El derecho humano al agua y el saneamiento. Disponible en: https://www.un.org/ga/search/view_doc.asp?symbol=A/RES/64/292&Lang=S
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