MISOGINIA: Laberinto del Crimen

 

MISOGINIA: 

Laberinto del Crimen

Juan Almendarez

 

 

El grito se escuchó en la naranja azul del planeta: 

“Soy la diosa tormenta, creadora de los huracanes 

Y la forma majestuosa de las olas de los mares, 

Soy la madre tierra, la mujer creadora de la vida  

De las plantas, animales y los seres humanos”. 

 

Somos migrantes como todos los seres y hemos  

Construido la historia al igual que los hombres 

Pero en condiciones desiguales. 

 

Cuando nos dominaron los conquistadores, 

Fuimos considerados inferiores 

Desalmados y desalmadas, esclavas y esclavos. 

 

Aplastaron nuestras creencias e inventaron 

Otros dioses y violentaron la memoria histórica 

Para cambiar totalmente nuestra cultura;  

así surgió Mesoamérica, con la sangre, el dolor 

Y el golpe a nuestras lenguas que avasalló 

La dignidad de nuestros pueblos. 

 

Soy la voz de la Pachamama de Honduras, 

 tierra fragmentada de Mesoamérica de la familia Abya Yala. 

 

Fuimos ignoradas por la emancipación criolla; 

La mujer indígena, negra y garífuna fueron 

Explotadas y humilladas por el colonialismo  

Estadounidense y el colonialismo interno  

De la oligarquía. 

 

Los gobiernos patriarcales y sumisos a la teoría del destino manifiesto  

y doctrina de Monroe, crearon la constitución de la República de Honduras  

Cuya ley, establecía una democracia sin mujeres,  

Puesto que se declaraba que todos los hombres  

Eran iguales ante la ley, y se omitían las mujeres, 

Los indígenas y los negros;  

Es una carta magna, patriarcal, racista y desigual. 

 

Los golpes de Estado militar, 

se han caracterizado por violación a los derechos humanos, racista, capitalista y patriarcal; 

militares entrenados en la escuela de las Américas en tortura, tratos crueles inhumanos y degradantes  

Y la desaparición forzada. 

 

Con Pinochet y los Chicago Boys, se instala el neoliberalismo 

Y proliferan los golpes de Estado, en Honduras y en América Latina 

Las abuelas de la Plaza de Mayo, y las madres de las desaparecidas 

Y desaparecidos, se convierte en las víctimas y mártires de la historia. 

 

La doctrina de seguridad y la geopolítica,  

fortalecen las bases militares y la política  

         Del Comando Sur; crece el sicariato,  

la trata y violación de niñas y mujeres, tráfico de órganos 

Los gastos en armas aumentan el hambre y 

La miseria.  

 

Se instalan las cárceles de máxima seguridad 

Máxima tortura, con los crímenes de lesa humanidad  

Asesinando a Bertha Cáceres, mujeres indígenas 

Campesinas y garífunas. 

 

El pueblo migra 

En caravanas sufriendo en carne viva,  

la captura de niños y niñas migrantes  

que son enjaulados y separados de sus madres 

En la nación del norte, maestra   

De la democracia racista donde el derecho real  

De ser mujer está ausente. 

 

Una niña de 13 años, Soad Bustillo Ham  

defensora de los derechos estudiantiles, 

Después de haber gritado en las calles, palabrotas 

Contra el presidente y ministro de educación, fue torturada  

Descuartizada, y encontrada en una bolsa plástica  

En la cercanía de su colegio, días después jóvenes estudiantes’ 

De secundaria fueron asesinados por cuerpos represivos. 

 

El Alma Mater, fue militarizada  

Algunos estudiantes y profesores fueron reprimidos y torturados. 

 

8 policías militaren, violaron a una joven mujer 

Apuntando sus armas en la cabeza mientras cada uno de ellos 

La violaba. 

 

En la cárcel de mujeres, dos embarazadas han sido sometidas 

Al castigo de la plancha, aislamiento, tortura y oscuridad 

Estos actos crueles, degradantes y de tortura 

Así como el asesinato de mujeres indígenas, campesinas 

Y garífunas, son categorías políticas neoliberales 

Que indican, que la mujer no es un ser humano. 

Porque según el filósofo de la economía política  

El ser humano es el ser supremo del ser humano 

Que nunca permitiría la explotación, la dominación, 

La desigualdad, la injusticia y el racismo. 

 

La desigualdad de la mujer, ha sido más critica  

Por la precarización mercantilización 

Y privatización de la salud y la educación 

Que en nombre de la pandemia ha servido 

Para crear el estado de excepción  

Que justifica la mayor violencia contra  

La vendedora ambulante, golpeada en las calles  

Por la policía y la mujer de las capas medias 

Confinadas en sus casas son objeto de asesinato 

Y violencia patriarcal. 

 

La misoginia, es el laberinto del crimen 

Y se oculta bajo la sombra de la impunidad 

De casi el 100%, la ley suprema. la justicia legal, 

Aplastan la verdad para proteger a los responsables del crimen 

Y la sombra de la verdad es la sombra  

De la corrupción donde la Corte es de la injusticia. 

 

La joven Keyla Martínez, estudiante de enfermería  

Capturada por el principio terrorista del Estado  

De excepción, y después de comprobarse que fue torturada  

y asesinada por la propia ley,

 se ha simulado el crimen de que se ahorcó 

En una celda policial. 

 

Ante este el crimen de un Estado policial y militar 

Que considera que las mujeres y hombres indígenas,  

campesinos garífunas y estudiantes  

Obreros y obreras no son seres humanos. 

 

Debemos unir al pueblo y detener el genocidio 

Y el respeto a los derechos de la madre tierra  

La mujer y los hombres de este pueblo 

Que ya no tolera más la impunidad 

De una falsa democracia y de un país sometido  

A la política imperial.